Miles Davis fue un revolucionario del Jazz. Su aclamado disco Bitches Brew es un punto de quiebre no solo en la historia de este género, sino en el de la música en general. No hubo precedentes para este disco que reinventó al Jazz-Rock y dio pie a que varios grupos excelsos de Jazz fusión aparezcan en esa época. Motivados y hambrientos por este nuevo estilo, músicos ejemplares como Herbie Hancock, George Benson y Weather Report replicarían el genero dentro de sus propios estilos con discos que ahora son de culto en la historia del Jazz.
Pero algo interesante que el Bitches Brew ha logrado a lo largo de tiempo no solo fue dejar huella en las bandas de su época. Sino que varios grupos contemporáneas hacen referencia explícita a la influencia directa que tuvo este elepé de Miles Davis, no solo en sus canciones sino en discos completos. Así, bandas como Radiohead, Flying Lotus, St. Vicent, The Mars Volta, entre otras han confesado haberse sentirse rendidos bajo la magia del Bitches Brew, provocandoles hacer música inspirados y motivados por el disco.
El Ok Computer de Radiohead fue inspirado en el Bitches Brew de acuerdo a varias entrevistas a banda. En Subterranean Homesick Alien se escucha ese mar de sonidos propio del disco de Miles Davis.
Yendo ahora al Elepé, fue un disco doble lanzado por Columbia en 1970 y producido por Teo Macero. Tal como cuenta el productor, fue un disco muy difícil de producir sobre todo por el trabajo que demandó la post-producción. Después de unas sesiones de grabación arduas en las que se trabajó con 2 bateristas y en algunas canciones hasta con 3 tecladistas, Miles Davis tenia unas ideas que implicaban el uso de algunos efectos sobre el material grabado. Además, en muchos de los casos se usaron efectos de loops y delay con cinta, así como la mezcla de diferentes partes de grabación en una sola.
La primera parte del disco contiene las dos canciones mas largas. Posiblemente sea la sección mas difícil de escuchar pero a su vez la mas alucinante. Algunos teóricos coinciden en que ambas canciones tienen la estructura de una sonata propia de la música del siglo 18 y 19. En esta clase de composición, se distinguen los siguientes elementos: una introducción con dos temas o motifs, una sección intermedia que es el desarrollo de los solos, la recapitulación donde se repiten los dos temas de la introducción, y el coda final. Pharaoh's Dance, el primer tema, es oscuro. Su galope rítmico constante te hace sentir que estas en todo momento como en una persecusion dentro un cerebro paranoico. No hay sonido que no te de tregua, los solos son fugaces pero en todos, los cerca de diez músicos hacen su un trabajo ejemplar.
St. Germain y la influencia en la inclusión de lo electrónico en el Jazz, una pizca de lo que fue otrora la idea del Bitches Brew.
El siguiente track es el que le da el nombre al disco. Bitches brew, es el tema mas largo con poco más de 26 minutos de duración. El intro que parece tener la misión de generar mas suspenso, es complementados por esos repiques marca registrada de Miles Davis para cumplir su cometido. Seguido del intro viene la sección mas groovy de esta primera parte, con un bajo marcando una línea bastante hard-rock y como si a los bateristas Lenny White y Jack DeJohnette pareciera que Mitch Michel se les apoderará de su cuerpo por unos instantes.
La segunda parte del disco es un poco mas descifrable. Su encanto esta en la atmósfera surreal incontrastable del disco. Spanish Key tiene una estructura mas acorde a los standar de jazz, con su forma tema-impro-tema. Hay algo de la influencia de la música flamenca en los modos,los cambios de armonía y melodías de la canción que Miles diseñó explícitamente. Las melodías que genera Miles con sus notas y sus silencios son fantásticas. Sus silencios aunque suene paradójico, son tan o más importantes que los sonidos en el estilo que él definió.
John McLaughlin es el único track donde no se escucha la trompeta de Miles en ningún momento. Fue un tema formado por Miles y Macero en la post-producción a partir de todo el material que poseía de las sesiones de grabación. Miles solía dar instrucciones bastante generales a los músicos y en este caso lo único que indicó fue que John empezaría el solo de guitarra y luego todos ingresan al groove al mismo tiempo. De ahí salio este tema.
Algo más contemporáneo aún. Flying Lotus y Kendrick Lamar en esta colaboración vive el sonido del Miles Davis.
Miles Runs the Vodoo Down, el nombre en referencia al Vodoo Chile de Jimi Hendrix, es si duda mi favorita. El groove conseguido por el bajo de Dave Holland es preciso y tiene algo de exótico que me recuerda a nuestro Landó o Tondero. Los solos son estupendos, empezando por el de Miles, que quizá sea el más espectacular del disco. Luego viene John McLaughlin con unos licks de guitarra asimétricos, y un Wayne Shorter con su impecable saxofón soprano. Mención aparte, Chick Corea y su solo en el piano eléctrico: distíngalo porque es el piano paneado a lado derecho del estéreo. Los dos últimos temas, Sanctuary y Feio fueron compuestos por Wayne Shorter. Aunque ya antes habían sido tocadas en vivo con otro estilo, aquí adquieren otra definición para encajar en el concepto del disco.
Es así como Miles Davis consiguió ser eterno. Su música incrustada en generaciones de músicos a los cuales no deja ni dejará de sorprender el Bitches Brew, el cual ya esta pronto a cumplir los 50 años.
PD: Recomiendo entrar a este link interactivo para cuantizar un poco la influencia de Miles Davis en la música y el arte en general.
Bitches Brew - Miles Davis
Columbia - 1970
Bitches Brew
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5
Oleh
diegocl02
